El italiano Giorgio Strehler (1921-1997), fundador del Piccolo Teatro de Milán, renovó la escena de su país y creó escuela, seguido, por ejemplo, por Luca Ronconi. El polaco Jerzy Grotowski (1933-1999) defendió una estética de pobreza escénica de gran influencia. Otros nombres destacados son los franceses Jean Vilar, director del prestigioso Festival de Avignon, y Ariane Mnouchkine, con su Théâtre du Soleil, y el inglés Peter Brook, célebre por sus novedosos montajes de Shakespeare.