REPORTAJES CULTURALES
Los últimos acordes del grupo vasco de rock Hertzainak sonaron en 1993, encima del tablado del polideportivo Anoeta de Donostia. Desde que se estrenaron el día de Noche Vieja de 1981 hasta el último concierto, reclamaron la desobediencia civil con diferentes melodías.
Casi a la vez que surgía el blues, en la ciudad de Nueva Orleans nació otra modalidad de música en torno a los antiguos esclavos de las grandes plantaciones del sur, el jazz: una música interpretada por bandas, y cuya principal característica es la improvisación. Louis Armstrong, Duke Ellington o Dizzie Gillespie han sido los máximos exponentes del jazz.
En los más de 100 años de su historia, el jazz ha evolucionado de manera impresionante, dando como resultado nuevos estilos musicales. El estilo Dixieland de los primeros años fue dando paso a melodías más aptas para bailar, después llegaría el bebop, el cool, el hard bop... Todos ellos son estilos jazzísticos y tienen en común la improvisación.
El rock and roll nació en la década de los 50 en los Estados Unidos y reúne diferentes corrientes musicales de dicha época; es la música que fusiona el sonido country y western de los blancos, y el Rhythm and Blues de los negros. Más que un ritmo, el rock and roll es un estilo de vida, y parte de una revolución juvenil que quería romper con la sociedad del momento.
A partir de los años 60, el rock ha ido evolucionando hasta nuestros días, surgiendo infinidad de estilos, expresiones y corrientes musicales, como el pop, el hard rock, el heavy metal y el punk, entre otros. A lo largo de las últimas décadas, The Beatles, The Rolling Stones, Led Zeppelin, David Bowie, Queen, Deep Purple o Sex Pistols, por ejemplo, han demostrado que este lenguaje universal ha sido sometido a un continuo cambio.