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Woody Allen, un director inagotable (I)
vie, 14 ago 2009 18:32:00 +0200

Director, actor, guionista cinematográfico, músico y escritor, Woody Allen es uno de los creadores más prolíficos de las últimas décadas. Ha dirigido tres cortometrajes y 38 filmes, actuado en 39, ha sido guionista de 40, ha escrito 22 libros y desde hace muchos años en toca el clarinete en la formación New Orleans Jazz Band. Tres Oscars, cinco Baftas, un Globo de Oro, el Premio Donostia y el cariño y respeto del público, entre otros, han sido la recompensa por la labor de tantos años.

Heywood Allen Stewart Konigsberg, Woody Allen, nació en Nueva York el 1 de diciembre de 1935. Aunque llegó a ingresar en la universidad, no tardaría en abandonarla. Ya desde muy joven se dedicó a vender chistes a famosos columnistas y cómicos profesionales (Ed Sullivan, Sid Caesar, Jack Paar o Pat Boone) y pasados algunos años escribió sketchs para clubes nocturnos, revistas de Broadway y programas de televisión.

Su primera aparición en televisión, en el famoso programa Tonight Show, le permitió ser descubierto por el productor Charles Feldman, quien le encargó el guión de la película ¿Qué tal, Pussycat?, una comedia de Clive Donner, rodada en 1965, y en la que también actuó el mismo Allen.

Mientras tanto seguía colaborando en revistas como Playboy, The New Yorker y Evergreen. En aquella época, su afición al jazz fue consolidándose y aunque comenzó tocando el saxo, se pasó al clarinete.

Cuatro años después, en 1969, tuvo la oportunidad de rodar Toma el dinero y corre, su primer filme como director, el cual estaba estructurado como una sucesión de gags. Películas como Bananas (1971), Todo lo que siempre quiso saber sobre el sexo y nunca se atrevió a preguntar (1972), El dormilón (1973) o La última noche de Boris Grushenko (1975) llegarían un tiempo más tarde y estos trabajos dejaron al descubierto la habilidad de Allen para el sarcasmo.

En 1972 coprotagonizó, junto a la actriz Diane Keaton, el filme Sueños de un seductor, de Herbert Ross. La interpretación de Woody Allen en esta comedia es uno de los momentos cumbres de su carrera. A continuación, Allen y Keaton iniciaron una relación sentimental que se vio reflejada en su participación en diversos filmes, entre ellos el más galardonado de los dirigidos por Allen, Annie Hall, que obtuvo el Oscar al mejor director, al mejor guión original (Marshall Brickman y el propio Allen), a la mejor actriz (Diane Keaton) y a la mejor película.

Después de rodar en 1978 el filme Interiores, en 1979 volvió a la comedia con su obra Manhattan, una de las más destacadas de su carrera. Allen protagonizaba la crónica romántica y divertida del ambiente seudointelectual neoyorquino junto con Diane Keaton, Michael Murphy y Mariel Hemingway.

Manhattan es una historia de alboroto y crónica sentimental entre dos parejas que intercambian amores. Woody Allen da vida al guionista de televisión Isaac Davis, enamorado de la adolescente Tracy. Esta relación con una menor escandalizó al público estadounidense y la película fue calificada "R", sólo tolerada para mayores.

Según el cineasta el objetivo de la cinta no era crear escándalo, sino rendir homenaje a su ciudad y a su músico, George Gershwin. Manhattan logró la aprobación de los críticos y finalmente obtuvo dos nominaciones al Óscar, el de mejor guión y mejor actriz secundaria (Mariel Hemingway).

(Foto: www.imdb.com)