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Más de siete décadas con el malhumorado pato
vie, 19 jun 2009 18:32:00 +0200
Su mal genio, su incomprensible lenguaje y su traje de marinero le han convertido en uno de los personajes más emblemáticos del Universo Disney. El pato Donald ha cumplido 75 años, y a lo largo de su dilatada y exitosa carrera ha hecho reír a millones de personas de todo el mundo. Desde su primera aparición en la fábula animada La Gallinita Sabia, ha intervenido en siete películas de animación, más que cualquiera de los demás personajes, incluido Mickey.

La edad no perdona a nadie. A pesar de que su imagen no haya cambiado, tras más de siete décadas en activo, no es de extrañar que sus hazañas sólo sean requeridas ya por los más nostálgicos. Ahora la amenaza llega con los nuevos héroes infantiles, y retirado ya del primer plano de la actualidad, el noble pato se ha limitado a intervenir en series televisivas como Duck Tales y Quack Pack.

Nacimiento del ave de pluma blanca más famoso de la historia

El conocido pato simpático hizo su debut el 9 de junio de 1934 como secundario en la historia La Gallinita Sabia. En aquella época ya mostró su malhumorado carácter al dar la espalda a una gallina que necesitaba ayuda para plantar y recolectar grano. Su singularidad, marcada por una voz solo comprensible para el resto de los personajes Disney, le llevó a protagonizar su primer corto de animación en 1937, Don Donald.

Fue entonces cuando presentó oficialmente a su novia, Donna, que pasaría a denominarse Daisy más adelante. Sus sobrinos Hugo, Paco y Luis hicieron su aparición animada un año más tarde, en la película Los sobrinos de Donald. El éxito de Donald fue tal que en la década de los 40 este ave cascarrabias había encabezado más historias que el propio Mickey Mouse.

Realizó más de 130 papeles protagonistas y decenas de apariciones en producciones del ratón más famoso del mundo y otros compañeros de Disney como Pluto o Goofy. Un currículum que le supuso una estrella en el paseo de la fama de Hollywood.

Cambios en el personaje

Donald se convirtió en fenómeno de todo el mundo. Los estudios Disney le definirían como un pato cuya "segunda o tercera intención es la buena pero cuando éstas emergen él ya camina en la dirección equivocada". Es un perdedor, pero un perdedor que jamás abandona.

El pato original era más bien alto, con las patas demasiado largas y, aunque resultara cómico no era lo bastante real. Con el tiempo lo hicieron más bajito, y de trazos más firmes: la cabeza y los ojos de mayor tamaño, y el pico algo más corto, para hacerlo más expresivo.

Lo que jamás ha cambiado ha sido su voz, que es lo que le convierte, desde el primer momento, en un personaje muy divertido. Sin duda se trata de uno de los personaje más versátil de todos los personajes de Walt Disney, ya que es capaz de realizar cualquier papel, excepto el de un mudo o de un caballero.

(Fotos 1,2,4,5,6,7: www.geocities.com 3: EFE)