El actor estadounidense, que con 19 años había debutado ya en el mundo del teatro, fue nominado en tres ocasiones a los premios Oscar, aunque no tuvo suerte y no consiguió ninguno de los premios. Entre sus películas destacan Sherlock Holmes, La cena de los acusados, Al servicio de las damas y Vivir con papá.
William Horatio Powell nació el 29 de julio de 1892 en Pittsburgh, Pensilvania (Estados Unidos). A los 19 años ya debutó en Broadway y estuvo trabajando en la escena neoyorquina durante una decada, hasta que dio el salto a la gran pantalla gracias a un contrato firmado con la Paramount. Por esas fechas, Powell ya había contraído su primer matrimonio, ya que se casó en 1915 con Eileen Wilson.
En 1922 debutó en la película Sherlock Holmes, film que dirigió Albert Parker basado en el famoso personaje de Arthur Conan Doyle. Sus películas más destacadas en los años 20 fueron Romola (1924, Henry King), Beau Geste (1926, Herbert Brenon), La dicha de los demás (1926, Brenon), Aloma del mar del sur (1926, Maurice Tourneur), La última orden (1928, Josef Von Sternberg), La redada (1928, Josef Von Sternberg) o Reclutas detectives (1928, Frank Strayer), entre otras.
El cambio al cine hablado no le supuso ninguna dificultad. Su primera película sonora fue Intromisión (1929, Lothar Mendes y Roy Pomeroy). En los años 30 triunfó encarnando a distintos detectives. El primero fue "Philo Vance" en películas como ¿Quién la mató? (1929, Malcom St. Clair) o Matando en la sobra (1933, Michael Curtiz).
En 1930 se divorció de Eileen y en 1931 se casó con la actriz Carole Lombard, con quien coincidió en tres películas: El gigoló (1931, Lothar Mendes), Un hombre de mundo (1931, Richard Wallace) y Al servicio de las damas (1936, Gregory La Cava). Powell y Lombard se divorciaron en 1933.
La subida al estrellato de William Powell se produjo con su protagonismo junto a Myrna Loy en la serie The Thin Man, iniciada en La cena de los acusados (1934) y prolongada en cinco títulos más.
En la década de los 30, Powell fue nominado en dos ocasiones al premio Oscar, la primera por La cena de los acusados (ganó Clark Gable por Sucedió una noche) y la segunda por Al servicio de las damas (el vencedor en esta ocasión fue Paul Muni por La tragedia de Louis Pasteur).
En los años 40 William Powell no intervino en tantas películas como en los decenios anteriores y cuando lo hacía, generalmente era en comedias. Entre otras, destacan Te quiero otra vez (1940, Van Dyke), Mi marido está loco (1941, Jack Conway) y Vivir con papá (1947, Michael Curtiz). Por su actuación en esta última película, Powell volvió a ser nominado al Oscar aunque perdió la estatuilla en favor de Ronald Colman (Doble vida). En 1940, Powell se casó con su tercera y última esposa, la actriz Diana Lewis (Los hermanos Marx en el oeste, Senda Prohibida).
En los 50 se retiró del cine, aunque antes apareció en títulos como Como casarse con un millonario (1953, Jean Negulesco) o Escala en Hawai (1955), su última película. Powell dejó viuda a Diana el 5 de marzo de 1984. El actor tenía 91 años.