A finales de los 80, el joven músico Billy Corgan tuvo que volver cabizbajo desde Florida a su Chicago natal. Se acababan de desvanecer sus sueños de triunfar sobre los escenarios con The Marked, la banda de rock gótico que lideraba. Tras el varapalo, Corgan comenzó a trabajar en una tienda de discos de segunda mano, un "santuario" de reliquias musicales donde en 1988, y con influencias de tantos géneros musicales como los que se mezclaban en la propia tienda, surgió uno de los grupos de rock alternativo más exitosos de los 90: The Smashing Pumpkins. Doce años después, tras vender más de 18 millones de discos sólo en Estados Unidos de América y convertirse una de la bandas de rock más aplaudidas por la crítica, el cuarteto se separó. Hace un par de años, dos integrantes del grupo volvieron a unirse para subir a los escenarios, aunque sin alcanzar el lustre de tiempo atrás.
Todo comenzó a finales de los 80 en Chicago. El jovencísimo músico Billy Corgan acababa de regresar de Florida, tras un infructuoso viaje en busca del éxito y la fama. The Marked, el grupo de rock gótico que el joven guitarrista y vocalista lideraba, había intentado sin éxito hacerse un hueco en la industria. Tras el fracaso vino la disolución, y Cornell volvió a su Chicago natal para trabajar en una tienda de discos usados. Precisamente en este lugar conoció al guitarrista James Iha en 1988, con quien compartía afición por bandas como , Led Zeppelin o Black Sabbath.
No tardaron en dar rienda suelta a su gran pasión, la música. Ayudados por una caja de ritmos, comenzaron a componer canciones y a ofrecer conciertos, bajo el nombre The Smashing Pumpkins. Posteriormente, propusieron a la bajista D'arcy Wretzky participar en el proyecto. De este modo, el trío comenzó a actuar en locales y bares, hasta que el dueño de uno de los más importantes locales de Chicago se ofreció a apoyarles, con una condición: sustituir la caja de ritmos por un batería de carne y hueso. Dicho y hecho. El elegido fue Jimmy Chamberlin. Así, en octubre de 1988, el cuarteto The Smashing Pumpkins ofreció su primer concierto.
En 1990, el grupo grabó varios singles, y un año después, publicaron un EP (Lull) compuesto por cuatro canciones. Tras el éxito del Lull, la banda firmó un contrato con Virgin para la publicación de su primer álbum. Para el debut oficial de la banda, la discográfica contrató al productor de Sonic Youth y Nirvana. Todo parecía ir sobre ruedas, hasta que llegó la grabación. Los conflictos y la polémica fueron los grandes protagonistas del proceso de grabación, ya que Corgan se empeñó en grabar él mismo todos los instrumentos, excepto la batería, para disgusto y cabreo del resto de integrantes.
Finalmente, en 1991, The Smashing Pumpkins publicó su primer álbum de estudio: Gish. El disco del cuarteto de Chicago obtuvo cierto éxito, lo que les llevó de gira con bandas como Red Hot Chili Peppers o Guns N' Roses. Demasiada presión para una banda principiante. La mecha que Corgan encendió en la grabación del disco acabó por convertirse en un gran incendio durante la gira: el cantante y líder entró en depresión, Iha y Wretzky rompieron la relación de pareja que mantenían y Chamberlin se enganchó a los narcóticos y al alcohol.
Siamese Dream, un disco salvador
Nada hacía presagiar que el cuarteto de Chicago podría tener continuidad. Tras los éxitos de Nirvana o Pearl Jam, la banda era incapaz de aguantar la presión de sacar un "disco vendedor". Corgan continuaba sin salir del hoyo y los problemas de Chamberlin no hacían más que aumentar. En este oscuro contexto, en 1993 comenzaron a grabar el que iba a ser el segundo álbum del cuarteto. El proceso de grabación fue un auténtico infierno. Corgan había intentado volver a grabar él los instrumentos, generando una enorme tensión en el seno del grupo. Chamberlain continuaba con sus problemas de adicción, y desaparecía sin previo aviso durante días. Así, la grabación se eternizó cuatro meses, con el consiguiente aumento del presupuesto, que al final ascendió a 250.000 dólares.
Mereció la pena. Siamese Dream, el segundo álbum del cuarteto estadounidense, vio la luz el verano de 1993 y fue un éxito. Aclamado por la crítica y el público, se vendieron más de 4 millones de copias sólo en Estados Unidos de América. Temas como "Today" o "Disarm" catapultaron al grupo.
(Fotos: Smashingpumpkins.com)