Un toro blanco volvía a raptar Europa en los años sesenta: los griegos de Aphrodite's Child conquistaban el continente mediante su pop psicodélico y su rock progresivo.
Eneas fue unos de los hijos de Afrodita, Diosa de la belleza y el amor. El joven fue criado por unos pastores hasta que, cumplidos los cinco años, su padre Anquises se lo llevó a la ciudad. Con el tiempo, Eneas se convirtió en el más valeroso de los héroes troyanos.
Dos milenios y medio más tarde, Eneas resucitaba del Olimpo griego para volver a ser un héroe. Pero esta vez, se trataba de un Olimpo musical. En la Grecia de los años 60, tres chicos formaban Aphrodite's Child, un grupo de pop psicodélico y rock progresivo, el grupo más importante formado en los años 60 en la antigua Hélade. Para ello, resultó significativa la inclusión de dos célebres héroes helenos, claro que de la época: el cantante y guitarrista Demis Roussos (nacido en 1946 en Alejandría) y el compositor y teclista Vangelis Papathanassiou (nacido en 1943 en Volos), futuro ganador del Oscar de Hollywood por la banda sonora de Carros de Fuego.
Vangelis era también Zeus, Zeus del grupo; su alma máter e instrumentista muy dotado que había pertenecido con anterioridad al grupo de pop The Forminx. Dejó este proyecto en 1967 y pasó a la familia de Afrodita. Aphrodite's Child se formaba en ese año, cuando Vangelis se juntaba con Roussos, vocalista procedente del grupo We Five, el batería Lucas Sideras (nacido en Atenas) y el guitarrista Anargyros Koulouris. Éste último no tuvo suerte: tuvo que dejar la banda cuando el grupo fue invitado por el sello Phillips para grabar su primer sencillo en París. Al estar cumpliendo el servicio militar, Anargyros no podía abandonar Grecia.
Y Europa fue raptada, no ya por Zeus convertido en Toro blanco, sino por el single de "Rain and tears", una composición que tomaba como referencia el famoso Canon de Johann Pachelbel. La ejecución vocal de Demis Roussos, hizo el resto. Éxito en todo el continente.
En 1968 publicaron su primer LP, End of the world. Estupendo disco pop psicodélico que además de incluir el sencillo "Rain and tears", contenía temas tan destacados como "Don't try to catch the river".
Un año más tarde, un nuevo álbum: It's five o'clock. Vangelis dominó de nuevo con su talento compositivo, creando maravillas como "Such a funny night" o la gloriosa "It's five o'clock". También incluían el single "Let me love, let me live", obra de Sideras.
Cuántos años se tardan para llegar al Olimpo de los Dioses nunca lo ha sabido nadie. Pero los hijos sesenteros de Afrodita, Aphrodite's Child necesitaron sólo tres. Tres años de lapsus y el regreso del guitarrista Anargyros Koulouris para publicar 666, la obra maestra, el salto a la cima. ¿Volcán surgido del fuego? Pues se basaron en el Apocalipsis de San Juan para componer este doble álbum conceptual de rock progresivo, con el single "Break", un tema que obtuvo un notable éxito a pesar de que la banda por esos momentos ya estaba separada. ¿O fuego de inquisición? La censura que sufrió la pieza, debido a que incluía sonidos orgásmicos de la actriz griega Irene Papas, obtuvo gracias a ello una publicidad adicional, que ayudó en su difusión.
Fuera lo que fuere, lo cierto es que después de la llama del éxito, el grupo dejó de ser lo que era. Vangelis se alejó de los escenarios dedicándose a componer bandas sonoras con enorme notoriedad, y Demis Roussos también obtuvo éxito en solitario, muchas veces en colaboración con Vangelis, pero el estilo musical nunca volvió a ser el mismo.