Pontón
FITXA
Nombre: Pontón
Localidad: Bilbao
Barrio: Camino del Puente
Comarca: Gran Bilbao
Provincia: Bizkaia
Tipología General: Panadería
Tipología Exacta: Alimentación y Bebidas
Siglo: XVIII
hiribildua.Época: Edad Contemporánea
Otros Siglos: XIX, XX
Estilo: Neoclásico
Fecha Construcción: 1794
Autor: Alejo Miranda
Descripción actual:
Pontón está en el último gran meandro del río Ibaizabal, a la derecha. El conjunto estaba formado por 4 edificios aislados, es decir, la panadería, el molino, la leñera y el granero; actualmente sólo se observan los restos de la panadería. Los edificios estaban uno encima del otro, escalonados en una pendiente. Derribaron el molino en 1987 y la panadería era un gran masa de estilo sencillo y materiales comunes, con cubierta cúbica y tejado a cuatro aguas. En la fachada principal se observan varios vanos ordenados en numerosas hileras y cuatro alturas, dintelados todos ellos , construidos en caliza trabajada de color gris.
Datos históricos:
La apariencia actual del conjunto es fruto de los años entre 1794 y 1845, pero en el siglo XVI ya había molino en Pontón. El molino quebró y, en consecuencia, en 1571 pasó a ser propiedad del Ayuntamiento de Bilbao. El Ayuntamiento lo cedía en subasta cada cierto tiempo. En 1793 una comisión de concejales bilbaínos deseaba construir instalaciones para fabricar harina con el objetivo de ofrecer harina y pan a la población de la ciudad y, de paso, evitar cualquier especulación con el terreno. Alejo Miranda fue el responsable del proyecto y construyó granero, molino, panadería y leñería. El granero estaba un nivel más arriba que el molino; de esta forma, el grano pasaba a la planta superior del molino a través de varias tuberías.
Transportaban la harina a la panadería a caballo o a la espalda, se bajaba a la zona de amasado, se preparaba la masa y se introducía en el horno. Cierto día la panadería se quemó y se subastó, la adquirió Máximo Agirre e implantó una fábrica de tela para alpargatas. Sin embargo, reparó el molino y continuó moliendo harina. La fábrica se incendió de nuevo en la Segunda Guerra Carlista. Y la repararon de nuevo pero dejó de fabricar telas definitivamente.
Renovaron totalmente el molino, lo dotaron con una caldera de vapor y siguió funcionando utilizando las nuevas técnicas austro-húngaras para elaborar pan. La panadería y la leñería quedaron sumergidas por lo que eran totalmente inservibles. Se bautizó de nuevo el molino como "Pontón de Viena" y continuó funcionando hasta la crisis de finales de los años 1920. En 1987 se derribaron las ruinas del molino y se construyó una entrada para las obras de encauzamiento del Ibaizabal.
Proceso productor:
A partir de 1794 un grupo de 50 hombres y mujeres trabajaba produciendo harina, amasándola y haciendo pan en hornos regulados con un pirómetro. Aunque no hubo grandes innovaciones tecnológicas, se organizaron pequeños equipos de trabajo y por esa razón se pudo cambiar el ritmo de trabajo y fijar un horario. Con todo ello intentaban lograr mayor productividad. La fábrica se organizó en espacios amplios y los escasos recursos técnicos de la época condicionaron la distribución de los lugares de trabajo.