Descripción y datos históricos

Pertenece a la línea Bilbao-Santander.

Es un edificio rectangular, con dos alturas. La planta baja está dividida en dos crujías que albergan la sala de espera y la taquilla, la oficina de información y demás servicios ferroviarios. La planta superior tiene tres crujías y alberga la vía férrea.

El edificio se asienta sobre muros de carga y tiene tres filas de 10 columnas de hierro fundido. En un principio había dos marquesinas salientes para cubrir el andén pero tras la guerra del 36 se sustituyeron por dos semibóvedas rebajadas con un lucero en el centro.

El cuerpo central de la estación tiene un túnel de acceso, dintelado y con puertas enrejadas de hierro fundido, y en las paredes se observan grandes ventanales de vidrio. El cuerpo de la derecha tiene dos accesos y en el de la izquierda hay un pasadizo que comunica la estación con la calle Bailén.

Hay dos escaleras dentro de la estación para acceder a los andenes y su balaustrada es de hierro fundido.

Se completa la estación con dos edificios que albergan oficinas.

El primero de ellos es obra del propio Severino Atxukarro y de la misma época, una casa con cuatro plantas (entresuelo, planta baja, primera planta y azotea). Su cubierta es a cuatro aguas, con forma de desván, exterior de pizarra. Sus paredes son de sillar y el basamento tiene forma de cojín. La fachada principal, que da a la calle Bailén, tiene una gran entrada rectangular. Y por detrás, hacia el andén, hay cuatro entradas con arcos rebajados.

El segundo edificio es anterior a 1910, una casa rectangular de tres alturas. La cubierta es a cuatro aguas, de teja plana, y descansa sobre una estructura de madera. La fachada delantera da a la calle Bailén.