Se puede acceder a este caserío desde el barrio de Bedoña, por una pista accidentada. Se trata de un gran caserío de estilo barroco, que se encuentra muy deteriorado y abandonado. En algunas partes el edificio ha cedido y presenta unas grietas peligrosas. Sin embargo, es uno de los caseríos de Gipuzkoa que mejor refleja su época. Es un edificio grande, de gran volumen, con una magnífica estructura (en el desván es donde mejor se aprecia). Según parece, el Consejo del Valle de Leintz se reunía en este caserío, y por ello se dice que fue ayuntamiento.

Es un caserío familiar de planta rectangular, con cubierta a cuatro aguas, de madera. Presenta sótano, dos plantas y desván. Todos los muros son de mampostería, con arenisca labrada en los esquinales. La fachada principal es magnífica y está orientada al suroeste. En la planta baja hay dos accesos adintelados con recerco de sillería. El dintel del acceso principal presenta un friso tallado y una cruz en el centro, también tallada. Una gran puerta de madera cierra dicho hueco. Del acceso principal se entra a un zaguán, cuyo suelo está revestido con piedra de cantos redondeados. Este segundo acceso también se cierra con una puerta de madera, que presenta asimismo herrajes. Además de los dos accesos, en la planta baja hay dos ventanucos. En dicha fachada principal, la separación entre la planta baja y la primera planta viene indicada por una platabanda de sillería. En la primera planta hay dos balcones y tres ventanas. En el desván, bajo un alero saliente (sostenido por canecillos profusamente decorados), solamente hay el hueco correspondiente a una ventana.

En mitad de la fachada que da al noroeste hay un acceso al espacio residencial, con una puerta de madera. La cocina del espacio residencial se encuentra en la primera planta, al igual que el salón principal y los dormitorios. Todo el suelo de esa planta es de madera trabajada con azuela y clavada con clavos forjados. Dicha fachada presenta algunos huecos de muchas medidas con recerco de sillería.

La fachada noreste tiene una abertura adintelada por la que se accede al sótano. En dicha fachada está el único elemento que se ha adosado al caserío: una tejavana de madera.

La fachada sureste presenta tres plantas. En la parte correspondiente al sótano, de mampostería renovada, se distinguen cuatro saeteras y un pequeño hueco abierto. En el resto de plantas (baja, primera y segunda), el muro se divide en dos partes, la mayor de las cuales presenta una estructura de madera.

Los establos ocupan la mitad de la planta baja (el suelo es especial). Por encima del establo salen dos postes, que llegan hasta la cubierta del desván. Dicha cubierta es magnífica y la sujetan diez postes; dos de ellos arrancan desde la primera planta, y el resto, desde los muros de la primera planta.